¿Algún día seremos ricos y famosos? –pregunté sorpresivamente al escritor Joaquín
Martínez Miramontes, con un par de cafés y postres de por medio. La noche nos
refrescaba con inesperada brisa, tras una sucesión de días en exceso calurosos,
en la ciudad de los tamarinos. Minutos atrás, había concluido la cuarta emisión
de mi programa de radio y televisión por internet, El Mensajero. Luego de una breve charla con el autor de los
Manuales para perversos I y II, mi amigo José I. Delgado Bahena; uno de mis
invitados –Joaquín– y yo, decidimos continuar la charla iniciada en el estudio
de televisión con nuestros seguidores como testigos, en una céntrica mansión
acondicionada como café, en el corazón de la ciudad. Antes habíamos hablado de
la importancia de las vivencias para el hacedor de literatura, y habíamos
compartido, tanto un bello poema de la otra invitada –la actriz Lupita Ayala–,
como varios escritos del propio Joaquín. El texto de Lupita, fue un poema
dedicado a su mamá, dado a conocer generosamente por la autora, como respuesta
al desafío de escritura a que dio lugar la carta hecha por la invitada de un
programa anterior, Rosa María Ramírez Arias. Los escritos de Joaquín, le han
surgido de las manos y la creatividad, tras seguir el camino de las letras, acompañado
por la escritora mexicana Ethel Krauze. Lupita Ayala habló de cómo su formación
como actriz le proporcionó las bases para convertirse más adelante en
escritora; vocación que albergaba en su ser, porque solía obsequiar poemas de
su autoría a sus jóvenes enamorados, en aquellos años de la más coqueta
mocedad. Joaquín Martínez, dijo que en cada uno vive como crisálida el escritor
o la escritora; narró episodios en que tuvo que enfrentarse a la página en
blanco y cómo, con persistencia, dedicación y arrojo, ha llegado a ser el que
ahora es. El denominador de la tarde-noche, no obstante, fue al mismo tiempo
que la literatura, la amistad. Porque los tres coincidimos en el valor de los encuentros,
sobre todo si éstos ocurren por el amor pleno y desinteresado a la dama vestida
de luces y letras, que lo mismo arroba que enamora o atormenta. Ella: la
Literatura.
–Los vine escuchando de camino y presté
atención a tu texto erótico, Joaquín –dijo
Delgado Bahena y, el autor y yo, sonreímos recordando con toda certeza, uno y
otro, los atrevidos pasajes de tal escrito, que igualmente habrán remontado a
nuestros escuchas y televidentes, a territorios de candente pasión.
Antes de cerrar el programa, faltando dos
minutos para la hora marcada –como lo apuntó después en Facebook nuestra amiga
Sol Manzanares–, aún invité mientras miraba directamente a la cámara, en un
intento de impactar mayormente al auditorio, a TODOS y TODAS, a participar en
el tercer certamen de texto autobiográfico “Rosa Nissán”, cuyo tema es “No sólo
para dormir es la noche”. Asimismo, anuncié la presencia de valientes creadoras
literarias amantes de las palabras, en el siguiente programa.
Una emisión más, había concluido. Los avatares
literarios nos dejaron a todos borrachos y excitados. Por eso propuse a Joaquín
ingerir una buena dosis de cafeína, antes de volver a nuestras ocupaciones
habituales, tras la inmensa emoción de estar en tantos sitios a la vez, gracias
a la magia de la tecnología.
–No sé si seré rico o famoso –me respondió
Joaquín– me conformo con ser feliz. Y yo no tuve más remedio que adscribirme a
su respuesta y mirar hacia las primeras estrellas de la noche, mientras la luna
recién llegada me besaba el rostro con su fresca brisa, que me obsequió de
golpe el aroma del más exquisito café.
–Que nunca me ciegue ante la felicidad que
tengo en mi vida, y que he tenido siempre como mi más grande tesoro –me dije.
Y, pese a los deseos de fama –que no niego– y al anhelo de riqueza –para curar
mi estrés–, hoy digo que las letras han traído a mi vida amigos, triunfos,
sonrisas, abrazos, libros, compañía en este camino y la certeza, de estar hoy
más que nunca, en medio del oasis del que siempre quise abrevar; el de la
felicidad por las cosas maravillosas de todos mis días; por los amigos y la
magia de los encuentros afortunados.
Los esperamos todos los martes por TV Yohuala (http://www.xhdbt.com/tv-yohuala/) y el 104.7 FM, de 19:00 a 20:00 horas. ¡Será un placer reencontrarnos ahí, cada semana!
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Joaquín Martínez Miramontes... ¿rumbo a la fama y la fortuna?
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